martes, 1 de noviembre de 2016

EL COLOR DE LA NATURALEZA

EL COLOR DE LA NATURALEZA

“Pintar la Naturaleza no es copiar un objeto, es la realización de una sensación.”
Paul Cézanne

En la literatura de todos los tiempos y en el arte medieval -por ejemplo en Notre Dame de París- se ha representado a la Naturaleza como un libro, abierto o cerrado según nuestra capacidad de interpretar su lenguaje.
Un lenguaje que para la razón es pura matemática, como diría Galileo Galilei y que para la sensibilidad es un lenguaje donde prima el color, que tiñe nuestra afectividad y modifica nuestro mundo emocional.
la primera sensación, la que primero llega a nuestra conciencia es la de la vista, y dentro de ésta, el color antes que la forma. Por ello en el marketing actual, el primer indicativo es el color: los tipos de combustibles que usamos para nuestro vehículo, los identificadores de un cableado eléctrico, el símbolo-color corporativo de un logotipo, etc.
El color es quien abre antes la puerta de nuestra sensibilidad y es por ello de vital importancia en todos los ámbitos de nuestra vida.
Hay colores que inspiran y descansan el alma, como el azul del cielo, que sugiere lo infinito; otros como el rojo excitan, son como un fuego que quema; otros que inspiran confianza como el amarillo del sol; otros como el verde, con su infinidad de matices -¿no es, en definitiva, el COLOR DE LA NATURALEZA?
Sabemos de la vida de una estrella por el color que presenta.  Por los colores que fueron absorbidos del espectro de luz, medimos la temperatura de una llama o de un metal candente por los bellísimos colores que irradian; durante la noche priman los colores violáceos y las sombras no son sólo grises, sino que tienden, como dijo Goethe, al azul; los dedos de rosa de la aurora nos despiertan a la vida; el sol sangra con sus tintes bermejos en el crepúsculo y muestra su exhuberancia, alegría y poder en la luz amarilla del mediodía; en la lejanía las montañas se tornan azules como si el color del aire fuese, precisamente azul, el blanco de las nubes es una promesa del agua que esconden y que va a fertilizar la naturaleza; las mismas flores con la geometría cónica de sus pétalos y la viveza de sus colores atraen a las abejas que las van a polinizar.


Sí, el lenguaje del color es el de la Naturaleza y también el del alma humana.





















jueves, 12 de mayo de 2016

ARTyTECTURAS



EXPOSICION EN EL PALACIO DE CONGRESOS DEL
ILUSTRE COLEGIO DE MEDICOS DE ALICANTE.
ENERO 2016




PEPE ROS                  PINTURA
MA. ROS                     ESCULTURA
ROSA ROS                  FOTOGRAFIA

“De eso, de la vida y de sentir admiración por los demás trata este fabuloso viaje que es el arte, en él, cada uno debe encontrar su propio camino y criterio”.

A MODO DE INTRODUCCION:
Los artistas del Renacimiento combinaban la práctica de la pintura con la de esculpir o con la del diseño de construcciones.
Desde Giotto y Boticelli hasta Rafael y Miguel Ángel, los conceptos de las disciplinas plásticas se plasmaban indistintamente en los diferentes soportes. Ejemplo de ello es Giotto cuando ensaya la perspectiva y la estructura arquitectónica en la caja espacial de sus pinturas, o Miguel Ángel, quién traspone en sus diseños de construcciones los volúmenes escultóricos y la grandeza de sus cuadros.
Quizás uno de los motivos por lo que se entremezclaban las visiones de los artífices, era la inexistencia de una educación y aprendizaje específicos, absorbiendo en un primer momento tan sólo las técnicas que dominaban sus maestros.
Otro de los planteamientos en la representación pictórica renacentista es la creación de espacios arquitectónicos imaginarios y fantásticos como recurso tanto para dignificar episodios religiosos, como hace Leonardo en la última cena de Milán, o como instrumento para representar las ciudades que encargaban dichas obras.
El proyecto “ARTyTECTURAS”, consiste en un planteamiento de 10 obras de tres disciplinas artísticas como son la pintura, la escultura y la fotografía, que nos hablan de la arquitectura desde distintos puntos de vista y utilizando sus propias herramientas esa investigación abarca las distintas formas de relación entre los tres géneros con la arquitectura.
Desde el expresionismo abstracto de las pinturas de Pepe Ros hasta el neoplasticismo de las esculturas de MaRos y la contemporaneidad de la fotografía de Rosa Ros.

“Al final, un artista es alguien que posee un universo propio”.













































domingo, 19 de abril de 2015

ARQUITECTURAS 145 X 145


ARQUITECTURAS 145 X 145

El proyecto “ARQUITECTURAS 145 X 145” consiste en la ejecución de 14 obras de dimensiones 1,45 x 1,45 m., realizadas con técnicas mixtas sobre tela, basadas en los argumentos de la abstracción pictórica, realizados a partir del desarrollo y la ejecución de una técnica personal, consistente en la mezcla entre pinturas acrílicas y otros componentes a base de esmaltes y materia, a través de diversas capas de pintura, rematadas en algunos casos con collages o con otros trazos libres y espontáneos.
Para la realización de los cuadros, se proyecta la superficie pictórica  en zonas segmentando el espacio pictórico-arquitectónico, a modo de plano de planta.
Recreándose en el análisis de la influencia de la Arquitectura en la pintura y en la conjunción entre ellas, a pesar de que no hay un fin específico de resaltar una u otra en la obra, interfiriendo de forma muy personal e íntima en la relación de las capas que componen las piezas.

La línea de investigación entre Arquitectura y Pintura recupera la vieja utopía de la fusión de las artes y de la relación que se establece entre ellas, como vehículos distintos para desarrollar procesos creativos similares, que en ocasiones pueden confluir.
La investigación abarca las distintas formas de relación entre el género pictórico y arquitectónico. Entre ellas, se pretende hacer hincapié en lo que aparentemente más los separa, su dimensión espacial: mientras que la pintura se desarrolla en dos dimensiones y tiene un carácter plano, la arquitectura lo hace en tres dimensiones y su carácter es espacial.
Sin embargo, esta distinción es solo aparente, porque es posible percibir espacio en una pintura -no solo a través de la ilusión óptica de la perspectiva sino también a través de una profundidad no figurativa.

En la combinación de ambas, es decir en los trabajos de pintura mural, esta idea se hace comprensible, ya que la percepción del espacio arquitectónico puede ser modificada a través de la superficie mural.
Los artistas del Renacimiento combinaban la práctica de la pintura con la de esculpir o con la del diseño de construcciones. Desde Giotto y Boticelli hasta Rafael y Miguel Ángel, los conceptos de las disciplinas plásticas se plasmaban indistintamente en los diferentes soportes.
Ejemplo de ello es Giotto cuando ensaya la perspectiva y la estructura arquitectónica en la caja espacial de sus pinturas, o Miguel Ángel, quién traspone en sus diseños de construcciones los volúmenes escultóricos y la grandeza de sus cuadros.
Quizás uno de los motivos por lo que se entremezclaban las visiones de los artífices, era la inexistencia de una educación y aprendizaje específicos, absorbiendo en un primer momento tan sólo las técnicas que dominaban sus maestros.
Otro de los planteamientos en la representación pictórica renacentista es la creación de espacios arquitectónicos imaginarios y fantásticos como recurso tanto para dignificar episodios religiosos, como hace Leonardo en la última cena de Milán, o como instrumento para representar las ciudades que encargaban dichas obras.


La pintura dispone del marco del cuadro y mediante los instrumentos de perspectiva, materia y color es capaz de captar luces y sombras. La primera y natural fuente de luz es el sol, no solo  describe el espacio, sino también el tiempo con sus colores y sombras cambiantes
La arquitectura se construye también mediante elementos emisores de luz, normalmente artificial; unos constituyen cuerpos luminosos e iluminados que brillan en la noche oscura como modernas luciérnagas para atraer a sus presas. Incluso a veces la luz, se muestra ella misma sin iluminar ni revelar el material al que ilumina, engañando nuestra vista y con ella a todos nuestros sentidos, creando falsos volúmenes y espacios, tan virtuales como los que nos ofrecen los ordenadores, la televisión o los anuncios luminosos.

Arquitectura 145 x 145 utiliza mallas, tramas, color, materia, de esta manera estas trasparencias y veladuras se presentan como distintas formas de entender una realidad en la que la función expresiva se vincula a lo que ocurre en el espacio del cuadro.

Louis Kahn escribió “La materia es luz consumida”, la luz engendra y es el origen de toda materia. Para que un objeto o superficie sea perceptible, la luz tiene que iluminarlo primero, y de ese modo es su portador. La potencia de la luz orienta y construye los límites de un lugar o los límites de un cuadro, la luz ha desempeñado siempre un papel esencial en la definición de la forma arquitectónica, con la silenciosa presencia de la luz ha materializado volúmenes y ha desmaterializado espacios, hasta el punto que la inmensa luminosidad mediterránea potenciaba la masividad de la arquitectura clásica mientras la tenue luz nórdica creaba una atmósfera a medio camino entre el cielo y la tierra en el interior de las catedrales góticas.
La luz se ha usado, como en el teatro, en la arquitectura barroca para configurar escenarios sobrecogedores donde alcanzar el éxtasis o ser adoctrinado, la luz ha generado sombras sin las cuales sería imposible concebir arquitecturas visionarias como las de Boulleé, y desde luego ha sido uno de los instrumentos fundamentales de la revolución operada por el Movimiento Moderno en la percepción del espacio arquitectónico. Desde Sant' Elia y Mendelsohn hasta Le Corbusier, Louis Kahn o Tadao Ando, la arquitectura del siglo XX ha buscado en la luz el mecanismo para superar el concepto clásico del espacio, de ese modo la luz cualifica y eleva a la categoría de obra maestra Ronchamp, la Tourette, el Palacio del Capitolio de Dhaka o el Panteón de Roma.
Arquitectura 145 x 145 estudia la luz de una manera especial, en donde su aparición en el cuadro es precisamente la que permite la visión del contorno, la textura, el color y su ubicación en el espacio.

El juego de luces y sombras sirve en cualquier caso para profundizar en la percepción del espacio, y para experimentar con ella más libremente, para entenderla desde distintos puntos de vista, y para comprender su descomposición racional.


                                                          1 SOL DE INVIERNO





                                                                 2 CAE LA NIEVE





                                                                3 ENTRE TINIEBLAS






                                                                      4 CUADRADOS




                                                            5 SOBRE EL HORIZONTE





                                                         6 LUCES DE LA CIUDAD





                                                      7 REFLEJOS EN LA CITY





                                                                  8 FRAGMENTOS




                                                                        9 LUCES





                                                           10 GREAT AVENUE









11 DESTELLOS


                                                          
                                                                     12 LLUVIA





                                                       13 CAOS EN LA CIUDAD






                                                                  14 LA CIUDAD IDEAL